Volvemos a Empezar, iMi Ex!

Capítulo 309 

Óscar conducia el auto, llevando a los tres de regreso a la villa de la familia Jiménez: Los padres de Oscar ya se habían ido a dormir. Tras aparcar, Óscar levantó cuidadosamente a Ariana en brazos y le dijo a Adela, “Ve y abre la puerta, trata de no hacer ruido para no despertar a mama y papá, no queremos que se preocupen.” ConTEent bel0ngs to Nôv(e)lD/rama(.)Org .

Adela asintió con la cabeza y corrió adelante para abrir la puerta. 

92 2 52 

Una vez dentro, Óscar fue directo arriba, llevó a Ariana al cuarto de Adela. Una vez ahi, dijo: “Tú cambiale la ropa a Ari, yo le prepararé algo para que se le pase la borrachera.” 

“Claro, está bien.” 

Adela vio cómo su hermano colocaba a Ari suavemente en su cama, esa delicadeza le hizo sospechar, ¿podría ser que…? 

*¿Qué esperas? Ve por algo de ropa limpia, yo mientras tanto prepararé algo.” 

“Si, ya voy,” dijo Adela, volviendo en sí y corriendo hacia el armario en busca de ropa. 

Como Adela no podia bañar a Ariana por su cuenta, solo consiguió un balde de agua caliente y un paño limpio para limpiarla un poco antes de cambiarla a un pijama. 

Justo cuando terminó, Óscar llegó con algo para aliviar la borrachera. Adela ayudó a Ariana a sentarse mientras Óscar le daba de beber. Viendo lo cuidadoso que era su hermano, Adela pensó si debería darle una mano a su amiga, asi que mientras observaba a su hermano cuidar de Ari con tanta delicadeza, preguntó con hesitación y ver qué iba a responder, “Hermano, ¿cómo van las cosas con Laia? ¿Realmente planeas… casarte con ella?” 

Óscar no respondió de inmediato, esperó a que Ariana terminara de tomar el remedio y la acomodo para dormir antes de responder lentamente, “Tal vez.” Miró a Ariana, quien ya estaba dormida en la cama con los ojos cerrados. De todos modos, ya no esperaba encontrar a otra persona que le gustara. Dicho eso, se levantó para llevar el plato abajo. 

Adela se impacientó, lo tomó del brazo y preguntó, “¿Cómo que no sabes? O si o no.” 

Viendo lo agitada que estaba su hermana, Óscar le preguntó con una sonrisa, “¿Por qué je alteras tanto? ¿No te agrada Laia? Son de la misma edad, deberían tener temas en común.” 

“Ella va a restaurantes elegantes, yo prefiero los puestos callejeros, ¿de qué vamos a hablar?” Adela no pudo evitar rodar los ojos. 

Oscar se rio al escuchar eso, pensando en cómo Ari y ella siempre disfrutaban de los mercados nocturnos y las parrilladas, compartiendo gustos comunes. No era de extrañar que fueran tan unidas. 

Sin embargo, aunque Laia tenía la misma edad que Adela, tal vez por haber vivido tanto tiempo en el extranjero, su estilo tendía más hacia lo maduro y sexy al estilo europeo, haciendo que pareciera mayor que Adela y Ari, quienes usualmente vestían con camisetas y jeans, o a lo mucho un traje profesional para aparentar. A simple vista, no se diferenciaban mucho de estudiantes universitarias. 

Oscar se sentó para charlar un poco con Adela. 

¿Ari aún espera por ese chico que le gustaba antes?” Oscar fue directo al grano. Adela se sorprendió con su súbita pregunta. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué su hermano preguntaba por el chico que le gustaba a Ari? ¿Acaso había algo que ella no sabia? ¿Era posible que… 

Ella siempre habia sabido que a Ari le gustaba su hermano, incluso le prohibió mencionar algo delante de él, diciendo que él ya tenía a alguien. Y viendo cómo su hermano trataba a Ari casi como si fuera su propia hermana, incluso más que a su verdadera hermana, ella asumió que Ari simplemente habia sido rechazada y que su hermano tenía a otra persona en su corazón.