Capítulo 335
Capítulo 335
-¡Escúchenme, déjenme explicar esto!-, gritaba Samson, enfrentando una multitud enfurecida, su cuerpo estaba temblando y sus labios hinchados templaban sin control, -Las cosas no son como ustedes creen…
-¡Samson, te voy a matar!-, gritó Miguel, irrumpiendo entre la gente, agarrándolo del cuello y lanzando un puñetazo tras otro con una furia descontrolada.
Sus venas se marcaban, y sus golpes, cargados de rabia, dejaban a Samson con el rostro desfigurado, sangrando y perdiendo dientes, causando que Amapola casi se desmayara del miedo.
-¡Ya basta, por favor, basta!
-¡Suéltalo, va a matarlo!
-Miguel, por favor, tenga piedad, podemos hablar esto….
Al ver la situación, los padres de Samson, entre lágrimas, intentaban separarlos, mientras que amigos, familiares y socios del Grupo Sam’s retrocedian, temiendo ser arrastrados al conflicto.
El escándalo de Samson, traicionando a Nerea y liándose con su propia hermanastra, había colmado la paciencia de la familia Carris.
No iban a perdonarlo, solo esperaban no ser arrastrados ellos también.
Miguel adoraba a Nerea, y no había dudado en enfrentarse a quien fuera por ella. Al ver aquel video, todos temían que pudiera acabar con la vida de Samson, e incluso descargar su furia en Amapola…
El rostro de Amapola se palideció, y aprovechando que todas las miradas estaban puestas en Samson, intentó huir hacia la salida con las piernas temblando
Pero al llegar a la puerta, dos guardias de seguridad con gafas de sol la detuvieron.
-Señorita Amapola, ¿a dónde cree que va?
-¿Quiénes son ustedes?
-¿Por qué me agarran? ¡Sueltenme, suéltenme ya! NôvelDrama.Org owns this text.
Los guardias, sin más, la arrastraron hacia el escenario, y sus gritos de terror se unieron al murmullo de
la multitud.
-Amapola, nuestra familia te ha acogido y protegido durante años, te trataron como a una hija, y Nerea te quiso como a una hermana. ¿Cómo pudiste hacer algo tan bajo y despreciable? ¿Acaso no tienes corazón?
-Aunque te crien entre cisnes, nunca dejarás de ser un pato salvaje.
Amapola, cuando Nerea y yo fuimos al orfanato a buscarte, ni siquiera te habiamos elegido. ¿Recuerdas cómo estabas, llena de heridas, rogándole a Nerea que te adoptara?
Llorando y contándole lo miserable que era tu vida, si no fuera por su bondad, ¿tendrías el estatus y los logros que tienes hoy? En lugar de agradecerle, le pagas con traición, jes de no tener corazón!
-Amapola, ¿por qué? ¿Por qué hiciste esto…?
Lanzada al escenario como si fuera basura, con su apariencia desaliñada, Amapola miraba a su alrededor a la multitud que parecia querer ahogarla con su desprecio, temblando de miedo.
12.11
Capitulo 335
-No, no es cierto…
-¡Esa no soy yo, no soy yo!
Intentaba negarlo, defenderse, pero la cámara habla capturado claramente su rostro y las marcas en su cuerpo. Incluso si los demás no lo sabian, sus padres si.
Miguel la miró, soltando a Samson lentamente, sus ojos estaban inyectados en sangre como los de una
bestia.
Después de Samson, seria su turno.
-¡Ah!-, gritó de repente, corriendo hacia Pablo y Camelia, llorando desconsoladamente, -¡Papá, mamá! Lo siento, lo siento, no fue mi intención, ¡todo es culpa de Samson, todo es culpa de Samson!
Señalando a Samson con odio, les dijo, -Fue culpa de él, todo fue él. Siempre me acosaba, me drogó y me llevó al hotel, intenté escapar pero no pude resistirme…
¡Desgraciada, desgraciada, qué sinvergüenza!
Subió a su cama, grabó ese video, arruinó su propuesta de matrimonio, arruinó su reputación, arruino su vida, jarruinó absolutamente todo lo que tenía!
¡Y ahora encima se atrevia a culparlo!
Deseaba con todas sus fuerzas hacerla pedazos.
Samson, golpeado hasta quedar mareado por Miguel, aún logró reunir sus últimas fuerzas para levantarse.