Chapter 232
Capítulo 232
Aspen miró el mensaje de Paulo con la cara hecha un poema y dijo. “Mejor no le contesto ahora!”
Estaba claro que Paula estaba usando la ceremonia de los ancestros para ridiculizarlo tanto a él y a Miro.
Después de colgar, se prendió otro cigarrillo.
Con Miro en esa condición, era imposible que se arrodillara para honrar a los ancestros o se parara a dar un discurso.
¡Solo se convertiria en el hazmerreir de todos!
Y si encima le daba otro ataque….
De repente, un estruendo vino desde la sala. Aspen rápidamente apagó su cigarrillo y salió corriendo
Miro estaba parado en la puerta de la cocina, y en el suelo, habla una cuchara de cerámica hecha añicos.
Aspen corrió hacia él y preguntó,
“¡Miro! ¿Estás bien? ¿Te lastimaste?”
Miro negó con la cabeza.
Aspen pregunto, “¿Qué hacías solo en la cocina buscando una cuchara? ¿Qué querías hacer?”
Miro respondió tranquilo, “Comer.”
Aspen se quedó sin palabras… “¿Recuerdas lo que te dijo papá hace un rato?”
Miro guardó silencio por tres segundos y luego dijo,
*Traela aqui, quiero verla.”
Aspen se sorprendió y exclamó, “¿Qué?”
Miro añadió. “Eso si, solo si entre tú y ella todo es transparente.”
El corazón de Aspen latia más rápido. ¿Miro estaba dispuesto a aceptar a Carol?
No pudo evitar reírse.
Todo su malestar desapareció y comenzó a sentirse extrañamente alegre.
Miro aceptaria a Carol, a una extraña, jese era su primer paso!
Antes de decir aquellas palabras, ni siquiera habia pensado que Miro aceptaria a Carol, no tenia ni un poquito de esperanza. Parece que la comida de Carol realmente habia conquistado su corazón.
¡Carol, te la rifaste! ¡Ese es mi orgullo!
Aspen estaba feliz por dentro y no pudo evitar elogiar a Carol en su mente.
“Papá nunca te mentiría con algo así. Si hay algo entre ella y yo, podrás verlo tú mismo. Come primero, luego la contacto para que venga a verte.” Dijo Aspen.
Miro asintió otra vez.
Aspen lo llevó al comedor, lo sentó en la mesa y colocó todos los platos que Carol había preparado.
Luego fue a la cocina por unos cubiertos nuevos para Miro.
Miro comia en silencio, sirviéndose él mismo.
Viéndolo comer con gusto, Aspen finalmente mostró una expresión de padre orgulloso que habla estado oculta por mucho tiempo.
Limpio los restos de la cuchara rota del suelo y se sentó frente a Miro para verlo comer.
Solo cuando eres p
padre o madre entiendes que ver a tu hijo comer o dormir es la mayor felicidad.
Cuando Miro terminó, Aspen preguntó,
Capitulo 232
“¿Cuándo quieres verla?”
Miro respondió con indiferencia, “Cuando sea, depende de ella.”
“Bueno, me comunico con ella en un rato y te aviso antes de que venga.” Dijo Aspen.
“Está bien.” Asintió Miro.
as
Miro volvió a su habitación y Aspen, con el ánimo por las nubes, terminó de limpiar y fue a su cuarto a contactar á Carol.
Pero solo entonces se dio cuenta de que la habia bloqueado.
Era un poco infantil que la desbloqueare asi como así, se sentía un poco avergonzado ahora.
Aspen pensó por un momento y decidió que por su hijo valia la pena pasar la vergüenza.
Desbloqueo a Carol y se armó de valor para llamarla.
La primera vez, ella colgó.
La segunda vez, ella colgó de nuevo.
A la tercera, ¡ella lo bloqueo!
Aspen, con la cara negra como una tormenta, intentó agregarla de nuevo en Facebook, intentando salvar un poco su orgullo
puso como mensaje:
Abel me pidió que te agregara, necesita hablar contigo.
Pero el mensaje se perdió en el vacio, ella no aceptó.
Y entonces, el teléfono sond. Era Abel.
“Aspen, la Señorita Carol dice que te mandé un mensaje para que la agregaras en Facebook, ¿cuándo te dije yo eso?”
Aspen sintió que se le caia la cara de vergüenza.
Furioso y avergonzado, replicó, “Ven por mi, vamos a buscar a Carol!” Property belongs to Nôvel(D)r/ama.Org.